MUJERES Y REINAS DE ANTIGUAS CIVILIZACIONES

Reinas y mujeres de antiguos imperios de Oriente Medio me inspiran a viajar por el mundo. Este relato va dedicado a reinas de antiguos imperios que fueron referentes entre mujeres al gobernar en un mundo de hombres poderosos y discriminación. 

Fueron reinas que lucharon para ascender y mantenerse en el trono  hasta demostrar que eran tan validas para gobernar como cualquier rey. Con cualidades únicas, todas coincidían en su belleza e inteligencia. Aunque gobernaron grandes imperios, muy poco se sabe de ellas, aquí van las elegidas:

Reina Hatshepsut:

Fue  reina-faraón de Egipto del 1490–1468 a. C

Ya desde pequeña tenia dotes para gobernar y su padre Tumbosis I le nombro su heredera, sin embargo una conspiración contra ella, hizo que su hermanastro ocupase el trono. Hatshepsut luchó por su derecho y con el tiempo protagonizó un golpe de estado por medio del cual se autoproclamaría reina ante al asombro de la tradicional sociedad egipcia.

Templo de Hatsepsut en Egipto

Hatshepsut gobernó de uno de los periodos  más prósperos de toda la historia egipcia y se encargó de muchos de los trabajos de rehabilitación en templos y del progreso urbanístico de su país. Su tenacidad e inteligencia le llevó a no conformarse con las normas de su tiempo, y a luchar por su derecho desafiando a toda una nación. Hatshepsut murió de una grave enfermedad tras ser víctima de varios acorralamientos por parte de sus enemigos. 

El templo funerario de Hatshepsut brilla en un magnifico enclave rocoso mimetizándose con el paisaje en Deir el-Bahari, (antigua Tebas). Este templo es una de las joyas del Antiguo Egipto que  tuve el privilegio de visitar en el año 2010.

La Reina Ester:

La reina Ester fue reina del imperio Persa al casarse con el rey  Jerjes I (Asuero) en los siglos IV y V a. C. Ester era una mujer de origen hebreo, la cual por su belleza y dulzura cautivó al emperador del imperio Persa. Dicen de ella que era una reina bella por fuera y por dentro, siendo conocida por su lealtad, valentía, prudencia, sabiduría y fidelidad. Desde el trono, supo cómo gestionar una crisis destinada a su pueblo hebreo y pudo evitar que su pueblo judío fuese destruido. El antiguo imperio Persa tenía su sede en la antigua ciudad de Susa, situada en el sudoeste del actual Irán. 

Restos de la antigua ciudad de Susa en Iran

Hoy en día, de la antigua ciudad de Susa sólo quedan algunas  ruinas, siendo en su época una ciudad poderosa y próspera. Tuve el privilegio de visitar la antigua ciudad de Susa en enero de 2018.

Reina Zenobia: 

Zenobia fue reina del imperio de Palmira (actual Siria) entre los años 267 y 272 d. C. Zenobia subió al trono al convertirse en esposa del rey Odenato, pero éste fue asesinado y Zenobia tomó el trono aprovechando las disputas en el interior del imperio por la corona del mismo. 

A la antigua ciudad de Palmira se la conoció como “la perla del desierto” y  Zenobia se encargó de fortificar y embellecer  esta prospera ciudad mediante la construcción de estatuas, monumentos y jardines entre otros.

Su época de reinado fue bastante dura, ya que  la zona se encontraba en la gran encrucijada entre oriente y occidente; por un lado el imperio Romano, y  por otro los reinos Asiáticos, a los cuales que tuvo que enfrentarse y donde  llegó a conquistar vastos territorios, incluido Egipto. 

Antigua ciudad de Palmyra en Siria

Desafió al mismísimo imperio Romano, delante del cual tuvo que rendirse y acabar su reinado. Aureliano conquistó Palmira y se cree que Zenobia fue ejecutada en Roma, aunque existe otra leyenda que asegura que el emperador Aureliano rendido ante su belleza, la perdonó y le envío al exilio.  Tuve la suerte de visitar las ruinas del el antiguo reino de Palmira en el año 2010.

Reina de Saba:

Apenas existen datos sobre los orígenes de la reina de Saba, también conocida por el nombre de Makeda. Fue Gobernante del reino de Saba sobre los años 1000 y 950 AC, el cual no se ubica geográficamente del todo de una forma clara y concisa. Se sospecha que pudo estar en el territorio actual de Etiopia, relacionándose con el esplendoroso antiguo reino de Aksum o en Yemen (En una de las zonas cerradas actualmente al turismo). Se sabe que el reino de Saba fue muy rico y muy conocido por su magnificencia y prosperidad. 

Aparentemente el reino de Saba era una sociedad matriarcal en la que el poder político era sucedido a los descendientes monárquicos vía femenina. 

Se dice de la reina de Saba que era una bella mujer inteligente y que resaltaba por su diplomacia y por sus leyes a favor de los derechos de la mujer. 

Antigua ciudad de Aksum (Foto por cortesía del viajero Germán Aguilar)

De origen religioso politeísta, la reina fue a visitar a Jerusalén al rey Salomón. Ésta se asombró tanto de la personalidad y sabiduría del rey de Israel, que se convirtió al monoteísmo. Salomón y la reina de Saba tuvieron un romance y un hijo en común: Menelik, que se convertiría en el posterior rey de Etiopía. Sin duda la reina de Saba es un personaje rodeado de leyendas y misterios que ha cautivado a la historia convirtiéndose en mito. Espero algún día conocer en persona el reino de Saba.

Sin duda cuatro historias de reinas fascinantes, ¿cual de ellas te gusta más?

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